El cold calling (también conocidas como llamadas en frío), es una táctica de marketing que consiste en tener un primer contacto con el público a través de llamadas telefónicas. ¿Con qué objetivo? Para que los usuarios:
- Conozcan nuestra marca.
- Sepan cómo nuestros productos o servicios pueden ayudarlos a resolver un problema.
Ahora bien, ¿Solamente se aplica para ello? ¡Claro que no!, porque en muchas de estas llamadas se genera una necesidad o interés, por lo cual, el vendedor puede aprovechar esta pequeña brecha para alcanzar el objetivo final: realizar una venta.
Ventajas de implementar el cold calling en una compañía
- El contacto marca-usuario es directo. Esto ayuda a generar una relación más cercana y de confianza con tus clientes.
- Las respuestas y dudas se obtienen de forma inmediata, al igual que los datos que estarán en tu base de datos.
- El cliente recibe información detallada sobre todos los productos y servicios que ofrece la compañía.
- Dependiendo de la interacción y las respuestas que se obtengan del usuario, la conversación puede dirigirse hacia el funnel de conversión.
- Es accesible para cualquier empresa.
- La atención es especializada y, por lo general, se genera con el mismo tono de voz que emplea la compañía en su web, anuncios o redes sociales.
¿Cómo crear una buena estrategia de cold calling?
Aunque muchos consideran que esta táctica es bastante intrusiva (sobre todo aquellas personas que no han solicitado una llamada), existen empresas que se apoyan mucho del cold calling, puesto que les ha generado algún tipo de beneficio. Pero, ¿Cómo lo logran? ¡Sencillo!, ideando una eficaz técnica de llamada en frío y siguiendo los tips que te mostraremos a continuación. ¡Toma nota!
Antes de la llamada
- Realiza un trabajo de investigación. Recuerda que la persona que coge el teléfono no debe de sentir que es un cliente más entre la multitud, sino que le estás brindando una atención personalizada. Por lo tanto, antes de ponerte en contacto con la persona, intenta tener a la mano los siguientes datos:
- Nombre.
- Puesto de trabajo.
- Cargo.
- Sector en el que trabaja.
- Intereses.
- Aficiones.
- Cualquier información que pueda ser de valor y haga sentir cómoda a la persona que está tras el teléfono.
- Envíale un email. Otra de las formas que puedes emplear antes de contactar con un posible cliente es enviarle un correo electrónico. De esta manera, el cliente no desconfiará del número cuando aparezca en su celular o hará que el primer contacto sea tan brusco.
- Crea un guión y memorizalo. El speach es importante al momento de efectuar una cold calling, ya que el mismo te orientará hacia los lugares que debes de ir explorando hasta convertirlo en cliente final. Por lo tanto, elabora un guión, apréndetelo y repítelo hasta que salga de manera natural, serena y con mucha confianza. ¡Sí se puede!
Durante la llamada
- Preséntate y dirígete al receptor por su nombre. El secreto de un buen cold calling, es hacer que el futuro cliente se sienta atendido de manera animada, profesional y personalizada. Por lo tanto, siempre dirígete con su nombre de pila, saluda con animosidad, pregunta cómo se encuentra y no te olvides de ser proactiv@ durante toda la llamada.
- Evita las preguntas que te lleven a finalizar la llamada sin lograr tus objetivos. Preguntas personales o incómodas pueden hacer que el futuro cliente se sienta inseguro. Para evitar esto, mejor haz preguntas sencillas y que no requieran de mucha información personal.
- ¡No te olvides de seguir el guion!. Tenlo a la mano en todo momento, por si se te desvía la conversación.
- Escucha a la persona que está al otro lado de la llamada. Sabemos que algunas personas hablan hasta por los codos, pero ellos serán tus leads y, por lo tanto, debes de escuchar cada información que te estén promocionando, y más si buscas llenar una base de datos.
- Ten a la mano un CTA. ¿La llamada no ha culminado con final feliz? ¡No te desanimes!, diles que llamarás pronto o recomienda tus redes, página web o local físico, para generar un llamado a la acción a estas personas.
Después de la llamada
- Agenda una segunda llamada y notifícalo por correo, para que el cliente sepa que volverás a llamar.
- No pierdas el contacto con las personas que has llamado. Recuerda que estos pueden ser tus posibles clientes.
- Realiza una llamada para que el usuario califique el producto y te deje opiniones, sugerencias o consultas.
Ahora que ya sabes como hacer una cold calling, ¿Qué estás esperando para ponerlo en práctica? Anímate a emplear esta estrategia de marketing en tu compañía, y comienza desde hoy a darle una atención personalizada a tus futuros clientes. ¡Tú puedes lograrlo!